Como hemos visto al utilizar el lenguaje no sólo lo hacemos como una herramienta para describir una realidad, sino que también podemos generar una nueva realidad, y resulta que cada vez que hablamos, podemos reafirmar o modificar la realidad en la cual nos encontramos.
Hemos empezado a desarrollar los diferentes actos lingüísticos y como es que a través de ello se motiva a la acción y su rol dentro de la generación y cumplimiento de compromisos, y vamos a seguir ahora con el acto de «Afirmar».
Si buscamos en un diccionario como wordreference el significado de la palabra «afirmar» podemos encontrar algunas acepciones como:
- Poner firme, dar firmeza: debemos afirmar bien los tablones.
- Asegurar o dar por cierta alguna cosa: afirma que no le conoce.
- Decir que sí mediante expresiones o gestos: afirmó con la cabeza.
- Asegurarse en algo para estar firme: se afirmó en el asiento.
- Ratificarse uno en su dicho: se afirmó en sus opiniones.
De ellas tomaremos como base para la gestión de compromisos lo relacionado al aseguramiento que podemos dar por alguna cosa o realidad en base al conocimiento o desconocimiento que tenemos de lo que viene pasando o de los resultados que podemos apreciar.
Pues cuando hacemos una afirmación estamos haciendo una descripción acerca de la realidad que podría ser verdadera o falsa de acuerdo a determinado contexto, pero en el entendido que nos estamos basando en hechos o evidencias, en contrario a algo que podría ser teórico o imaginario.
En vista que una afirmación podría ser verdadera o falsa entonces se encuentran sujetas a confirmación, por lo que cuando hago una afirmación asumo el compromiso que lo que digo corresponde a lo que es realidad para nuestro entorno y por lo tanto uno asume la posibilidad de presentar la evidencia o un testigo que corrobore mi afirmación
Para todo esto debemos tener en cuenta la existencia de un trasfondo de obviedad, es decir que existe un acuerdo tácito o social de lo que se constituye como evidencia, por lo tanto hay elementos o cosas que ya se encuentran o damos como aceptadas por ambas partes.
Como recomendación es importante revisar o ponernos de acuerdo sobre aquellos que consideramos como «obvio» pues no siempre todo aquellos que consideramos como obvio resulta así para todas las partes y por lo tanto es preferible tomarse un tiempo y de ser necesario hacer explícito aquellas cosas que consideramos como implícitas u obvias.
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